Said Betanzos / Baja California
Un grupo de migrantes hondureños decidió saltar el muro fronterizo entre Tijuana y California para cruzar ilegalmente a Estados Unidos; sin embargo, los migrantes fueron detenidos por los agentes de la Border Patrol que fueron desplegados en la
frontera.
Tras esperar varias horas, una joven con tres meses de embarazo, así como una mujer y su hijo decidieron saltar la barda, pero inmediatamente fueron detenidos por los agentes.
Al filo de las cuatro y media de la tarde de este miércoles, una hondureña identificada como Yuri, junto con sus cuatro hijas, una de dos años, quienes también forman parte de la primera caravana que durmieron la noche del martes debajo del Faro de Playas de Tijuana, ingresaron ilegalmente a Estados Unidos por la zona de playa.
Para ayudarlas, dos hondureños treparon al cerco metálico que separa a México de Estados Unidos, gritando consignas contra Donald Trump y los agentes de la Patrulla Fronteriza que estaban ahí en esos momentos.
Minutos después Yuri escaló el muro y saltó a la zona de playa en territorio estadunidense, y seguida por sus cuatro hijas caminaron sobre la arena hasta que fueron detenidas por los agentes desplegados.
Los ocho hondureños, siete mujeres y un niño que cruzaron ilegalmente a Estados Unidos, son parte de los 357 migrantes que llegaron a Tijuana la mañana del martes 13.
La Dirección Municipal de Atención al Migrante informó que son más de 800 los centroamericanos que han llegado a Tijuana desde el pasado domingo.
Gobernadores preocupados
Con la llegada de los primeros centroamericanos a la frontera norte, los estados de la frontera norte manifestaron al secretario de Gobernación, Alfonso Navarrete Prida, su preocupación por el tiempo que puedan permanecer varados ante las dificultades que, anticipan, enfrentarán para ingresar a Estados Unidos.
Para ello, los gobernadores de Sonora, Baja California y Nuevo León sostuvieron una reunión privada en la que estuvieron presentes funcionarios de la Secretaría de Relaciones Exteriores, la Policía Federal, el Instituto Nacional de Migración; así como la próxima titular de Segob, Olga Sánchez Cordero.
Alrededor de 5 mil 512 migrantes arribaron desde la noche del martes y el transcurso del miércoles al poblado de La Concha, en Escuinapa, en los límites de Sinaloa y Nayarit, donde hicieron una escala para después ser trasladados en autobuses hasta Sonora, como ha sucedido con otros grupos de dichas caravanas.
A bordo de varios camiones de pasajeros, integrantes de un contingente aproximado de 200 migrantes fueron llevados de Querétaro a Guanajuato para continuar su paso con destino a Guadalajara y de esta manera llegar a Tijuana.
Con información de: Carolina Rivera, José Luis Pérez y Estrella Álvarez
Milenio Diario