“En esta temporada como en cualquier otra es difícil reducir el precio de la tortilla porque los molineros obtienen pocas ganancias por el elevado costo de los insumos para elaborar su producto”, expresó Luis Castro, conocido empresario del ramo.
Dijo que desde que entró en marcha la Reforma Energética subió el precio de los insumos como las tarifas eléctricas comerciales, el combustible para transporte y la tonelada de harina de maíz que antes costaba 11 mil 100 pesos y este año subió a 11 mil 600.
Esta situación dificulta bajar el costo del kilo de tortilla que actualmente se cobra a 16 pesos en el molino, sin embargo, los motorepartidores la venden de 17 a 18 pesos porque la llevan hasta la puerta del hogar.
Luis Castro advirtió que el valor de la tortilla podría aumentar antes de concluir el año a 20 pesos el kilogramo. Y para concluir aclaró que en Escárcega no existe la Unión de Molineros y cada tortillero o empresario le pone el precio que quiere a su producto, pues algunos compran al mayoreo y otros apenas tienen para pagar los insumos en abonos con los proveedores.
Información: Rafael Can Santos
