El Sistema Municipal de Agua Potable y Alcantarillado de Carmen (Smapac) gestiona ante la Comisión Nacional del Agua y la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado del Estado de Campeche (CAPAE) los recursos económicos para un estudio y búsqueda de aguas dulces del subsuelo de Nuevo Progreso y con ello combatir el desabasto en la Península de Atasta.
Nicolás Hernández Ynurreta Mancera, director del Smapac, aceptó que la escasez es un problema añejo en esta zona del municipio, pues durante varios años se ha minimizado la inversión en la reparación o cambio de los motores que extraen el agua de los pozos someros que existen actualmente, ni se han cambiado los tubos que llevan el agua a las comunidades.
Para el gobierno municipal es prioritario dar solución ante la cercanía de la temporada de sequía.
Actualmente, el Smapac busca el dinero para realizar estudios en terrenos ubicados en Nuevo Progreso, donde se cree que se puede encontrar yacimientos de agua dulce en condiciones para el consumo humano.
El proyecto en su primera etapa incluye los trabajos de perforación y análisis pues el agua encontrada debe certificarse mediante la norma NOM-004-CONAGUA-1996.
De ser positivo el estudio, el gobierno municipal que encabeza Óscar Rosas González se daría a la tarea de crear el proyecto de un acueducto que se ramifique a las seis comunidades que integran la Península de Atasta, desde Nuevo Campechito hasta Puerto Rico, donde habitan cerca de 30 mil personas según el último censo realizado por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
El problema actual en la Península de Atasta es que los pozos no son profundos, tienen esquemas de galerías filtrantes son muy someros y si se sobreexplotan pueden salar donde está el suministro, por ello, se tiene que racionar el agua. La situación de los pobladores de Atasta es diferente a los de la región de Sabancuy donde sí hay abastecimiento de agua dulce.
Y ADEMÁS
Robo de equipos
Para complicar las cosas, el robo de cableado eléctrico de la planta de agua en el poblado de Emiliano Zapata y en otros poblados de la Península de Atasta agrava la ya precaria situación del abasto de agua, lo que genera pérdidas económicas para el sistema y para las comisarías, que debe reponer el material hurtado y no son nada baratos indico el funcionario municipal.