Que en Ciudad del Carmen allegados al presidente municipal actual, Pablo Gutiérrez Lazarus, están desesperados luego de la derrota que sufrieron en las urnas a manos del priísta Óscar Rosas González. No pueden superar que los carmelitas les retiraron su confianza y votaron por otra opción para gobernar la isla en los próximos tres años.
Que el propio Gutiérrez Lazarus ha interpuesto diversas demandas ante los Tribunales Electorales y ha sufrido ya dos reveses, al serles rechazadas sus querellas; aún tiene la esperanza de que Tribunales federales reviertan el resultado de la elección, aunque esa posibilidad es cada vez más remota ante la falta de sustento de las demandas.
Que a sabiendas de que todo está perdido, ahora, sus seguidores, trabajadores del Ayuntamiento que no quieren perder la chamba, han empezado una campaña de odio en la isla, mediante la instalación de mantas con mensajes ofensivos contra las autoridades electorales, estatales y magistrados del Estado.
Que detrás de la colocación de las mantas está una persona que cobra en la nómina del Ayuntamiento de Carmen, que buscaba ser parte del cuerpo de regidores y que tiene su predio en la colonia El Guanal, justo donde apareció la primera cartelera. Otro que está inmiscuido es Gustavo Salinas García, inspector de Protección Civil municipal, a quien vecinos de la colonia Renovación sorprendieron e impidieron que colocara más mensajes que incitan al odio y generan encono por un proceso electoral que ya quedó atrás.