Luciano Chávez Collí
*Proviene de una familia de enfermeros
*Lleva alrededor de 20 años en la salud pública
El trabajo de la enfermería, es el brazo de la salud, sin embargo la profesión se vuelve más titánica cuando quienes la desempeñan son varones, sobre todo quienes laboran a diario en el medio rural, tal como le sucedió en un principio a Luciano Juan Chávez Collí.
Actualmente adscrito a las Unidades Médicas Móviles del programa Extensivo de Cobertura y Fortalecimiento a la Atención Médica, en entrevista con Novedades Campeche, Chávez Collí expresa que el amor a la enfermería se lo inculcó su madre, pero que además dentro de sus familiares hay enfermeras, lo cual fue el principal motivo por inclinarse por tan noble profesión.
¿Cómo se da ese acercamiento con la enfermería?
Estudié la carrera en Enfermería por mi madre, y en mi familia hay 10 enfermeras, y aunque se pensaba antes que era solo una profesión para mujeres, pero no es así porque en la carrera hay varones.
¿Se ha avanzado en esa paridad?
En lo personal, cuando ingresé a la carrera había varones, pero era un pequeño grupo, pues tan solo en mi salón de clases de 40 alumnos, solo seis éramos varones, estamos hablando de 25 años atrás.
¿Ahora cuál es el panorama?
Ya llevo 20 años laborando en la Salud Pública y la situación ha cambiado en forma paulatina, porque hay mayor concientización sobre tema y poco a poco la gente va dejando a un lado los prejuicios, pero si en un principio era un poco difícil.
¿Qué satisfacción te deja esta noble profesión?
Muchas, en lo personal el ayudar primero, porque esta carrera es muy humanista, y el hecho de llevar los servicios de salud a las comunidades rurales, como yo que me desempeño en el medio rural, que la gente te gracias de corazón, es algo significativo y te hace crecer como ser humano, eso es lo bonito de esta profesión.
¿Pero que te permite abordar estas profesión?
Pues permite en diferentes procesos, abordar los temas de salud, enseñarle a la población empoderarse en su salud, que conozcan el porqué de cada procedimiento que se realiza, y que ellos mantengan ello, considero que es lo más valioso para todo ser humano es la salud?
¿Qué sucede cuando el paciente es una mujer y tiene que ser tratada por un enfermero?
Cuando se trata de casos de pacientes mujeres por situaciones invasivas como la realización del papanicolau o exploración de mama, la confianza uno se la va ganando a través del contacto con la población, dejar a un lado el morbo, que eso no los inculcan en la carrera, es algo que tenemos que separar, claro que si hay una limitante cultural, que cuando se trata de mujeres para realizarles las revisiones médicas, por lo que se llevan a cabo los enfermeros lo llevan a cabo lo menos posible.
¿Es más difícil en el medio rural esa situación?
Sí, porque la población está más arraigada en su cultura y el machismo, que es una de las barreras, que no nos permite actualmente al cien por ciento atenderlo, inclusive en las áreas donde tenemos compañeros enfermeras, es una limitante para poder abordar la exploración y revisión en las mujeres.
¿Hay campo de trabajo para los enfermeros, considerando
que la demanda está algo saturada?
Sí hay, porque es generacional, ya que se jubilan compañeras o compañeros, otros que emigran a otras áreas, por lo que quedan espacios vacantes.
¿Qué has aportado a la enfermería?
Conocimientos, el poder interactuar con la población, es la parte humanitaria que se ha venido perdiendo en la enfermería, pero yo creo que hay que mantenerla y preservarla, lo más alto que debemos tener en la enfermería, estar al nivel de las personas, porque no somos más que ellos, sino que solo brindamos un servicio médico, y eso nos hace enriquecernos como profesionistas de la salud.
Por: José May