
Ciudadanos manifestaron su inconformidad ante el incremento en sus tarifas de energía eléctrica. De manera general señalan que en el reciente bimestre deben hasta un 40 por ciento más de lo que habitualmente pagaban, por lo que exigen que se ajuste la tarifa para Campeche de manera inmediata, pues su economía ya no alcanza para más.
Al acudir a las oficinas de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) ubicadas en la capital campechana para efectuar sus pagos, la queja fue generalizada pues de un bimestre a otro y, pese al subsidio aplicado por el Gobierno Federal, los recibos aparecieron con un notable incremento, sin más explicación que el detalle del consumo realizado en cada domicilio.
Los quejosos, como Jorge Vera, consideraron que se aplica una tarifa injusta para Campeche, pues durante gran parte del año la temperatura es muy alta y por ende se incrementa el consumo de energía al mantener con mayor esfuerzo los electrodomésticos, lo que se refleja en sus recibos de pago.
“Este aumento ha sido de bimestre tras bimestre, si comparamos lo que pagamos en estas mismas fechas del año pasado a cómo nos llegó este recibo, es casi un 40 por ciento más, no podemos estar pagando cuentas de luz tan altas, que ya rebasan los cuatro mil pesos y no tenemos tantos aparatos”, destacó.
La queja generalizada se mantuvo en las afueras de la CFE, donde nadie les daba razón de los incrementos, por lo que la queja se centró también en que no tienen a quién recurrir cuando consideran que hay un error en la lectura del consumo y en el pago aplicado, manteniéndose en la indefensión.
Los ciudadanos pidieron a las autoridades federales tomar en cuenta las peticiones que se han hecho tanto por el Gobierno del Estado como por otras organizaciones de la sociedad civil, para revisar las tarifas que se aplican en Campeche, pues consideran que pueden cambiarla tal y como sucedió en Tabasco.
“Lo único que pedimos es que acepten los estudios que se han presentado donde se comprueba que Campeche requiere otra tarifa, y que se nos cobre lo justo, no estamos pidiendo que nos regalen nada, pero que ya no abusen, estamos en la decisión de o pagamos la luz o le damos de comer a la familia”, expresó Mario Rivera.
Adicional a la queja por el alto cobro de la energía, se sumó la molestia por la falta de cajeros automáticos que se encuentren en servicio, pues en las oficinas centrales, de las tres máquinas que hay, solo una trabaja de manera adecuada, y las otras dos o no reciben el pago o no otorgan el comprobante.
Por: Daniel Castillo