CALKINÍ.- Muchas familias que tienen adeudos en las financieras y casas de empeño comienzan a mostrar su preocupación por la falta de ingresos para pagar los intereses o liquidar las cuentas pendientes, ya que las instituciones de crédito, en su mayoría, no muestran interés en apoyar a los clientes a pesar de que no se niegan a cumplir el compromiso adquirido.
A principios de año muchos obtuvieron el recurso económico por grupos en conocida financiera, ahora no tienen para pagar porque se paralizaron las labores de todo tipo y no hay circulante, lo que les preocupa porque se están venciendo los plazos y si no hay para abonar mucho menos para liquidar.
Con la esperanza de que se difiera la cuenta pendiente a más meses, Martha Moo Can y Margarita Pech Canul coincidieron en que ellas nunca imaginaron la magnitud de la contingencia del Coronavirus y se arriesgaron a sacar un crédito en conocida financiera en esta ciudad, pero ahora que no hay trabajo y mucho menos ventas sienten que se ahogan con las deudas.
El principal temor es que las cooperativas de crédito no les concedan un plazo y les exijan el efectivo bajo amenazas, cuando su intención no es dejarlos mal.
“Nuestra única esperanza es que el gobierno en sus tres niveles busque alternativas para apoyar a las familias de escasos recursos y poder tener para comer y saldar las deudas pendientes más adelante, pero si la situación empeora seguro que vamos a perder los bienes que dejamos como garantía”, precisaron las mujeres.
En situación similar están muchas personas que tienen adeudos en las casas de empeño y que no pueden abonar.