Se sospecha que aproximadamente 190 miembros del personal de la Agencia de Obras Públicas y Socorro de las Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina (UNRWA), incluidos profesores, están involucrados en el ataque sorpresa a Israel por parte del grupo islamista Hamás el 7 de octubre del año pasado. Puede que sea miembro. Jihad Islámica. Foto tomada en noviembre de 2023 (2024 Reuters/Amr Abdullah Talsh/Foto de archivo/Foto de archivo)
JERUSALÉN/GINEBRA (Reuters) – Unos 190 miembros del personal de la Agencia de Obras Públicas y Socorro de las Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina (UNRWA) han sido arrestados bajo sospecha de estar involucrados en un ataque sorpresa del grupo islamista Hamas contra Israel, incluidos maestros. El año pasado 7. Los empleados pueden ser miembros de Hamás o del grupo militante de Gaza Jihad Islámica. Así lo reveló un documento de la inteligencia israelí.
Reuters ha visto el documento de seis páginas. El documento enumera los nombres y fotografías de 11 personas presuntamente involucradas en el ataque de Hamás del 7 de octubre, incluida una que trabajaba como consejera en una escuela dirigida por la UNRWA. ayudando al hijo
Otro es un trabajador social que se cree que coordinó el movimiento de los vehículos y las armas utilizadas en la emboscada, mientras que un tercero participó en el ataque al pueblo en el que murió una décima parte de la población y un cuarto. Se sospechaba que estaba implicado en un atentado contra un festival de música en Reims en el que murieron más de 360 personas.
«Según la información, los documentos y los documentos de identificación capturados durante la guerra, aproximadamente 190 miembros del personal de la UNRWA pueden ser miembros de Hamás o de la Jihad Islámica», decía el documento. Acusó a Hamás de «establecer sistemática y deliberadamente una infraestructura terrorista» en una amplia gama de instalaciones y activos de las Naciones Unidas, incluidas escuelas. Hamás niega las afirmaciones de Israel.
El portavoz de la ONU, Stephen Dujarric, dijo el día 29 que la ONU no ha recibido oficialmente este documento.
En respuesta a las acusaciones, más de 10 países, incluidos Estados Unidos y Alemania, suspendieron la financiación a la UNRWA. La UNRWA dijo que no podría continuar sus operaciones en Gaza y en toda la región más allá de finales de febrero a menos que se reanude la financiación, y pidió una revisión de la decisión de congelar la financiación.
El Secretario de Asuntos Exteriores Blinken dijo en una conferencia de prensa que las acusaciones eran muy creíbles y profundas, y que seguiría de cerca la respuesta de la UNRWA.
Cuando se le preguntó sobre las condiciones para reanudar la financiación, dijo: «Como ha dicho la UNRWA, existe una necesidad inmediata de investigar, procesar a quienes puedan ser considerados responsables y revisar los procedimientos».
El ministro de Asuntos Exteriores israelí, Katz, pidió la dimisión del director general de la UNRWA, Lazzarini, diciendo que «el personal de la UNRWA participó en la masacre del 7 de octubre».
El Primer Ministro de la Autoridad Palestina, Shtayeh, condenó el «ataque político planeado» de Israel contra la UNRWA y apeló a que se reanude la financiación.
Un funcionario israelí dijo a Reuters que 190 personas nombradas en el documento eran «luchadores y asesinos empedernidos», mientras que alrededor del 10% del personal de la UNRWA creía que tenían vínculos comunes con Hamás o la Jihad Islámica. Posible.
La UNRWA emplea a unas 13.000 personas en Gaza.
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